La jerarquización de los estadísticos, que pueden llegar a ganar en Estados Unidos hasta US$ 125.000 en las principales compañías en el primer año luego de hacer su doctorado, es un subproducto de la reciente explosión de datos digitales. En todos los campos que se nos ocurra, la computación y la web están creando montañas de datos para analizar – sensores de señales, cintas grabadas de vigilancia, chateos en redes sociales, registros públicos, etc. Y los datos digitales prometen multiplicarse por cinco para 2012, según proyecciones de IDC.
Sin embargo, los datos son sólo la materia prima del conocimiento. En el mundo del futuro todo será vigilado y medido, pero el gran problema va a ser la habilidad de los seres humanos para usar, analizar y extraer conclusiones de esos datos.
La nueva camada de estadísticos – especialistas en estadísticas – se especializa en ese problema. Usan poderosas computadoras y modelos matemáticos súper complejos para buscar patrones con sentido y aprendizajes de esas inmensas cantidades de datos. . Las aplicaciones son sumamente diversas: mejorar las búsquedas en Internet y la publicidad online, extraer información sobre secuencias de genes para investigación de cáncer o analizar datos de sensores y ubicación para mejorar el manejo de los embarques de alimentos.
Pero aunque son los más visibles, los especialistas en estadísticas son sólo una pequeña parte del ejército de expertos que usan modernas técnicas estadísticas para análisis de datos. Las habilidades numéricas y de computación, dicen los expertos, importan mucho más que los títulos. De modo que los nuevos detectives de datos provienen de áreas como economía, ciencias de la computación y matemáticas.
Todos ellos son bienvenidos en la Casa Blanca estos días. IBM, viendo también una oportunidad en servicios de “data-hunting” (caza de datos) creó en abril un grupo para la optimización del análisis de los datos. La unidad aprovechará la experiencia de más de 200 matemáticos, estadísticos y otros analistas de datos en sus laboratorios de investigación. Pero 200 no le alcanzan. Su plan es contratar otros 4.000 analistas.